De 6 a 12 jugadores y a partir de 10 años.
La Habana, 29 de diciembre de 1955. Tras una comida organizada para sus “fieles” secuaces, Don Alessandro comienza a hablar de los “negocios” en progreso, cuando suena el teléfono de la habitación trasera del restaurante: el Padrino ha sido convocado a la oficina del presidente Batista, por lo que ha de confiar su preciosa caja de puros a sus secuaces. Pocos saben que ésta tiene un doble fondo y que bajo una primera capa de cigarros ¡se halla un compartimento repleto de diamantes! Cada jugador tendrá que coger la caja, abrirla y optar por traicionar al Padrino y robar algún diamante o seguir siendo un leal y “honesto” mafioso, ser el Chófer, un Sicario o incluso un agente del FBI infiltrado (cogiendo la ficha correspondiente). Al caer la noche, el Padrino recuperará la caja que ha pasado de mano en mano para descubrir con rabia que sus diamantes han desaparecido. Tendrá que recuperar su tesoro sin dejar de castigar a los responsables, a los que proporcionará unos preciosos zapatos de cemento antes de tirarlos a la bahía. Tras un acalorado debate el Padrino tendrá que tomar unas cuantas decisiones difíciles... ¿Encontrará, con la ayuda de sus fieles secuaces, todos sus diamantes? ¿Perderá el respeto de los suyos haciendo acusaciones en falso? ¿Serán los ladrones más astutos que él? ¿O el FBI hará que todos terminen entre rejas?